En los últimos tiempos, muchos estudiantes han recurrido a la inteligencia artificial, específicamente a ChatGPT, para que les ayude a realizar sus tareas escolares. Sin embargo, se han encontrado con una sorpresa desagradable: la IA miente y esto ha llevado a suspensos y a la falta de corrección en sus trabajos.
Es importante entender que la inteligencia artificial no posee conciencia propia ni la capacidad de razonar como un ser humano. Cuando entrenamos una IA, buscamos que encuentre patrones y genere soluciones a partir de ellos. Sin embargo, estas soluciones pueden ser acertadas o pueden ser auténticas tonterías, dependiendo de la calidad de los datos y la información proporcionada.
No podemos decir que la IA miente, ya que no posee esa capacidad, pero sus conclusiones pueden ser incorrectas debido a la falta de información o a datos erróneos. Además, ahora que la IA puede generar textos con lenguaje natural, es más difícil discernir si provienen de una persona o de un algoritmo. Esto aumenta el riesgo de obtener resultados incorrectos, lo cual es especialmente preocupante en trabajos académicos que requieren autoridad y conocimiento.
Los efectos de esta situación en la educación pueden ser desastrosos. Los trabajos académicos forman parte del proceso de aprendizaje de los estudiantes, y recurrir a la IA para obtener calificaciones es perjudicial. Se está privando a los estudiantes de adquirir las competencias necesarias para su formación profesional.
Es importante entender que no es la IA la que miente, sino la persona que la utiliza de esta manera. Sin embargo, esta tendencia ha generado una preocupación generalizada entre los profesores. Algunos incluso se niegan a corregir los trabajos de sus alumnos si sospechan que han utilizado ChatGPT. Esta actitud puede convertirse en una represalia común por parte de los profesores en todo el mundo ante esta nueva forma de hacer trampas.
Nadie desea tener un médico incompetente, un arquitecto cuyas construcciones se derrumban o un ingeniero que diseña puentes inseguros. Si estás en etapas educativas inferiores, el uso de la IA para hacer el trabajo puede dificultar tu comprensión de conceptos posteriores que requieren una base de conocimiento sólida. Así que, por tu propio bien, evita que ChatGPT haga el trabajo por ti que no puedas controlar, ya que la IA a veces miente y puede perjudicarte.